¿Será Dios real?
¿Será Dios real? ¿Habrá un ser en el universo capaz de crear todo lo que nos rodea? ¿En realidad existe alguien así? ¿Qué les sucede a sus seguidores? ¿Qué Dios es el verdadero? ¿Cuál es la diferencia de este Dios y cualquier otro?Como cristiano en mi vida estas preguntas se hicieron presentes. A pesar de haber tenido varias experiencias con Jesús, haber asistido toda mi vida a la iglesia, leer la Biblia con frecuencia,y haber leído una gran cantidad de libros sobre el tema… Simplemente la duda llegó, esta se torno en miedo, mucho miedo al considerar la posibilidad de que toda mi vida creí en el producto de una necesidad meramente mental. Un producto de la conciencia humana y del progreso de la sociedad. Mi corazón se partía mientras escuchaba acerca de esta posibilidad, no podía creer que mi mejor amigo, era una supuesta realidad, que no existía.Con el pasar del tiempo la iglesia se encargaba de hacerme creer que las dudas y preguntas no podían ser expresadas, solían decir “Es pecado dudar de Dios”. Pero en mi mente, retumbaba el versículo en Hebreos 11: 6 “Y sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que El existe, y que es remunerador de los que le buscan.” Sin embargo las dudas me abrumaban y muchas veces me encontré escapando de la realidad intentando no pensar en ellas. Esto debilitó mi fe, desde el interior de mi alma, como si se tratara de un veneno que quemaba mi interior. Y como Job, en mis dudas, me encontré discutiendo con Dios. Su respuesta fue la misma que le dio a Job…
Donde estabas tu cuando yo hice los cielos y la tierra, donde estabas tu cuando puse la tierra en su lugar, dímelo si sabes
(Job 38).
Aun así, habían preguntas que no encontraron respuestas. ¿Cómo iba a saber que mi Dios es real? De repente, la decisión de alabarlo cambio mi perspectiva. Todos tenemos la necesidad de desbordar nuestro ser sobre algo; ya sea una persona, un trabajo, un equipo, un partido político, una profesión, un objeto, o incluso una idea. Está en nuestro ser la necesidad de alabarlo. Dios nos creo con esta necesidad (Juan 4:23-24).Pero, ¿por qué? La Biblia dice que Jesús estaba destinado a morir desde antes de la fundación del mundo (1 Pedro 1:9)
¿y qué significa esto? ¿Acaso Jesús sabia que íbamos a pecar, que su Hijo tendría que dar su vida para perdonar nuestros pecados? Pero, ¿por qué nos perdono a nosotros y no perdono a Satanás, que también se revelo contra el mismo Dios? Porque Jesús quería que le alabáramos por elección, a pesar de que no estamos obligados. Al tener libre albedrío, nos permitió elegir si queríamos alabarlo y/o creer en El.Es cierto que para creer en Dios hace falta fe, pero también es cierto que para NO creer en El también hace falta fe, por que..
¿y qué significa esto? ¿Acaso Jesús sabia que íbamos a pecar, que su Hijo tendría que dar su vida para perdonar nuestros pecados? Pero, ¿por qué nos perdono a nosotros y no perdono a Satanás, que también se revelo contra el mismo Dios? Porque Jesús quería que le alabáramos por elección, a pesar de que no estamos obligados. Al tener libre albedrío, nos permitió elegir si queríamos alabarlo y/o creer en El.Es cierto que para creer en Dios hace falta fe, pero también es cierto que para NO creer en El también hace falta fe, por que..
Los cielos cuentan la gloria de Dios y el firmamento anuncia la obra de sus manos.
(Salmo 19:1)
Puedes pensar que los milagros no existen y que nada tiene sentido, pero así mismo puedes pensar que toda nuestra existencia, que tiende al caos, es un gran milagro y solo Dios sustenta. Puedes creer que Jesús murió, por que no hay quien crea en El, o que es un producto de una mente débil. También puedes creer en la primera causa perfecta, el creador de la sustancia misma. Pero luego de todos los estudios, argumentos y análisis la elección esta en ti, puedes elegir seguir a Dios, tener esperanza, vivir una vida de paz, amor y gozo en medio de las peores circunstancias ó puedes elegir una vida de glorias efímeras, amores momentáneos, y vacío en el alma.Hoy te invito a que pruebes a Cristo, que le des una oportunidad para que sea el centro de tu vida. Te invito a que te dejes moldear por su Palabra, y vivas para Él. !No te arrepentirás! Si deseas hacerlo ahora mismo, te invito a que hagas esta oración…Señor que estas en los cielos y que puedes llegar a lo profundo de mi corazón, se que he hecho las cosas mal y te pido perdón por todo. Reconozco que moriste por mi en la cruz del calvario y resucitaste. Te pido que me limpies con tu sangre y escribas mi nombre en el libro de la Vida, amen. Si hiciste está oración te pido que busques una iglesia en tu comunidad y hagas pública tu confección de fe y razón.
La paz de Dios te acompañe, Waldemar Curbelo
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